El negocio que ya tienes, aunque aún no lo operes

Por Aquiles Julián 

¿Qué dirías si te digo que ya tienes un negocio, aunque no lo hayas comenzado a operar?

El consumo de las personas de tu entorno son la materia prima de tu posible negocio.
Tus relaciones ya consumen.
Gran parte de su consumo personal y familiar se concentra en el consumo cautivo:
- Alimentos
- Productos de limpiar la casa
- Productos de lavar la ropa
- Productos de higiene personal
- Productos de arreglo personal y belleza
- Productos de salud y bienestar
- Servicios
Otra parte menor se dedica al consumo opcional: gustos, aficiones, recreación, etc.
Las personas, tus relaciones y las que no lo son, trabajan para tener dinero con que comprar y pagar lo que necesitan.
Ya el mercado existe: tus relaciones y su consumo.
Está en ti si quieres minar (sacar beneficio) del dineral que mueven cada mes en consumo tus relaciones.
Tú eliges si quieres ganar o no, porque si no lo haces, alguien más lo hará por ti.

Tus relaciones ya consumen, y seguirán haciéndolo las suplas tú o las supla otro.
Igual, alguien ahora gana dinero por suplir a tus relaciones.
El consumo es algo que va a suceder siempre.
De hecho, ahora mismo te suples de otros y tus suplidores ganan dinero de tu consumo.
¿Por qué no empiezas ganándote tú el dinero de tu consumo que hoy se va a los bolsillos de tus suplidores?
¿Por qué no actúas para que parte del dinero que hoy tus relaciones mueven a los bolsillos de sus suplidores, venga a los bolsillos tuyos?
Para eso sólo se necesitan dos cosas que nadie puede hacer por ti:
1. Tomar la decisión de ganar
2. Actuar proactivamente

Si queremos desarrollar un negocio, el foco es el cliente y sus necesidades, gustos y deseos, aspiraciones, expectativas y preocupaciones, no en lo que uno quiere, si no en lo que él quiere.

Si entendemos la esencia de un negocio, sabremos que proviene de poner al otro en el centro de atención:
Sus gustos
Sus necesidades
Sus intereses
Sus temores
Sus aspiraciones
Sus preocupaciones
Sus expectativas
Y ocuparse de que logré lo que se propone con nuestra ayuda y servicio.
Todo lo demás es secundario a esto, que es lo esencial

Un negocio se enfoca en servir, facilitar, asesorar y actuar para que las personas, los clientes, logren sus objetivos.
No se enfoca en la venta, sino en facilitar la compra y en la satisfacción plena del cliente, el logro de sus propósitos, con beneficio para uno como operador.
Un negocio es una relación entre personas, una relación humana entre una persona que quiere lograr algo y está dispuesta a pagar por conseguirlo, y alguien dispuesto a facilitarle lograr ese propósito.
Si creemos que se trata de vender, no entendemos el sentido de un negocio.

Ya el consumo existe y va a seguir existiendo. Y si tú no lo suples, alguien más lo hará.
De hecho, tú mismo ya consumes y vas a seguir consumiendo. Y alguien gana y se enriquece con tu consumo.
Tu elección es entre empezar a minar un consumo que ya existe y ganar, supliéndoles a tus relaciones parte de los productos que ya consumen y seguirán consumiendo, o seguir dejando que otros se ganen un dinero que podría ganartelo tú, por simple pereza o falta de iniciativa.
No te falta dinero, ni siquiera clientes. Te falta decisión y acción

¿Queremos construir un negocio? Ya lo tenemos en potencia, pues tenemos relaciones que consumen bienes y servicios y un negocio se organiza alrededor de clientes que se suplen de uno. Los clientes son el corazón y el sentido de un negocio. Como ya consumen y son nuestros parientes, vecinos, amigos y conocidos,ves cuestión de:
1. Respaldarnos de un suplidor que provea los productos
2. Apalancarnos de una plataforma de negocio
3. Asegurarnos que manejamos marcas de consumo cautivo
4. Hacer que nuestras relaciones conozcan y experimenten los beneficios y ventajas que tiene cambiar las marcas que usan a las nuestras
5. Pulir nuestras habilidades interpersonales y enfocarnos en que nuestras relaciones logren sus objetivos